En el torbellino de la era digital, resulta sorprendente -y refrescante- encontrarse con clientes que no están totalmente inmersos en el mundo de la tecnología. Sin embargo, para los profesionales del marketing digital, esto supone una serie de retos únicos. ¿Cómo pones al día a un cliente sobre los aspectos esenciales de las redes sociales, la comunicación por correo electrónico y el marketing digital cuando no forman parte de su léxico cotidiano? No temas, porque con el enfoque, la paciencia y las estrategias adecuadas, puedes convertir este posible obstáculo en una oportunidad de crecimiento, tanto para ti como para tus clientes. Esta guía te guía a través de los aspectos esenciales de la gestión de relaciones con clientes que pueden estar empezando desde cero en su comprensión de las herramientas y estrategias digitales.
Comprender la perspectiva de tu cliente
Lo primero es lo primero: ponte en el lugar de tu cliente. El mundo digital puede resultar desalentador para alguien que no ha crecido con él como segunda lengua. Aborda cada interacción con empatía. Recuerda que no existen las “preguntas tontas”. Tu paciencia y tu voluntad de explicar los conceptos con claridad pueden marcar la diferencia a la hora de construir una relación sólida y de confianza.
Simplificar la jerga técnica
El lenguaje técnico puede ser una barrera. Tu trabajo consiste en derribar estas barreras simplificando el lenguaje que utilizas. Cambia los términos técnicos por un lenguaje sencillo que describa claramente su significado y el valor que añaden. Por ejemplo, en lugar de “SEO”, explica que estás “asegurándote de que la gente pueda encontrar su sitio web fácilmente en Google”.
Introducción a los fundamentos de las redes sociales
Las redes sociales pueden ser una mina de oro para las empresas, pero también es un paisaje complejo por el que navegar sin un mapa. Empieza por presentar a tus clientes las plataformas que más se ajusten a sus objetivos empresariales. Utiliza analogías y ejemplos de la vida real para ilustrar cómo los medios sociales pueden servir de escaparate digital, forma de relacionarse directamente con los clientes y herramienta para compartir su historia única.
Aspectos esenciales de la comunicación por correo electrónico
El correo electrónico es a menudo el alma de la comunicación profesional, pero sus matices pueden perderse para alguien que no esté acostumbrado a la correspondencia digital. Guía a tus clientes a través de las nociones básicas para crear una cuenta de correo electrónico profesional, redactar mensajes claros y concisos y gestionar eficazmente su bandeja de entrada. Destaca la importancia de la etiqueta del correo electrónico, como cuándo utilizar CC/CCO y el poder de una línea de asunto bien redactada.
Desmitificar el marketing digital
El marketing digital abarca una amplia gama de prácticas y plataformas. Empieza por lo fundamental: cómo actúa un sitio web como base de operaciones, el papel del contenido para atraer visitantes y los fundamentos de la publicidad online. Explícales cómo la analítica puede ofrecer información sobre lo que funciona y lo que no, permitiéndoles tomar decisiones informadas sobre su estrategia digital.
Establecer expectativas realistas
Gestionar las expectativas es crucial, especialmente para los clientes que pueden no entender el tiempo y el esfuerzo que conllevan los esfuerzos de marketing digital. Sé transparente sobre lo que se puede conseguir, los plazos implicados y la importancia del esfuerzo continuado en lugar de las acciones puntuales.
Proporcionar recursos y herramientas
Equipa a tus clientes con recursos que puedan ayudarles a aprender a su propio ritmo. Esto puede incluir guías sencillas, tutoriales o incluso recomendaciones de herramientas fáciles de usar. El objetivo es capacitarles para que se sientan más seguros en sus interacciones digitales, incluso fuera de tu apoyo directo.
Fomentar las preguntas y los comentarios
Fomenta un entorno en el que los clientes se sientan cómodos haciendo preguntas y dando su opinión. Este diálogo abierto no sólo ayuda a su proceso de aprendizaje, sino que también puede proporcionarte valiosas ideas sobre cómo puedes servirles mejor.
Conclusión
Reducir la brecha de conocimientos digitales con los clientes menos familiarizados con la tecnología no consiste sólo en facilitar tu trabajo, sino en construir una asociación basada en el respeto y la comprensión mutuos. Si dedicas tiempo a educar y capacitar a tus clientes, estarás sentando las bases de una relación que pueda resistir el rápido ritmo del cambio digital y prosperar en el mundo online. Recuerda que el viaje es tan importante como el destino. Tu paciencia, empatía y voluntad de adaptar tu estilo de comunicación son clave para navegar con éxito en este viaje.
Así que, ¡a aceptar el reto de trabajar con clientes no expertos en tecnología! Es una oportunidad para perfeccionar tus propias habilidades, profundizar en las relaciones con los clientes y marcar una diferencia tangible en el éxito de sus negocios en la era digital.